Conocer a detalle los términos y condiciones de tu contrato puede hacer la diferencia entre perder o ganar una demanda hipotecaria.
¿Has recibido una demanda hipotecaria por falta de pago y ahora temes perder tu casa? Es momento de revisar a detalle el contrato de tu hipoteca.
¿Por qué? Simple, muchos prestamistas suelen cambiar las reglas del juego y modificar el tipo de interés del crédito hipotecario ofrecido con el fin de obtener más ganancias.
En ocasiones, también abusan de que las personas no suelen entender muy bien cómo funciona el tipo de interés en hipotecas y modifican los términos del contrato a su favor.
Es por ello que hoy queremos platicarte sobre tipo de interés en hipoteca y sus características principales. Toma nota:
Hay tres tipos principales de hipotecas: de tasa fija, de tasa variable y de tasa mixta.
Hipoteca de tasa fija
Cuando obtiene una hipoteca de tasa fija de un prestamista, la tasa de interés del préstamo sigue siendo la misma durante la duración de su contrato. Los prestamistas suelen ofrecer acuerdos de tasa fija de entre uno y cinco años, aunque algunos pueden extenderse hasta un período más largo de diez años.
La ventaja de una hipoteca de tasa fija es que el pago mensual no cambia incluso si cambia la tasa de interés del prestamista. Esto puede ser útil para presupuestar tus finanzas y proporciona cierto grado de certeza sobre los gastos mensuales.
Sin embargo, la desventaja de este tipo de hipoteca es que si la tasa de interés del prestamista cae, el prestatario no podrá beneficiarse de pagos más bajos.
Además, como la tasa de interés de la hipoteca es fija, los contratos más largos pueden tener tasas de porcentaje anual más altas que los contratos más cortos. Esto es para que los prestamistas compensen el dinero que pueden perder en los pagos mensuales en caso de que suban las tasas de interés.
Las hipotecas de tasa fija también pueden incluir multas por terminar el acuerdo antes de tiempo o pagar de más, pero no en todos los casos, así que asegúrate de estar de acuerdo con las cláusulas de tu crédito.
Hipotecas de tasa variable
Las hipotecas de tasa variable ofrecen una tasa de interés fluctuante durante la duración de tu hipoteca, lo que puede cambiar el monto de tus pagos mensuales a medida que pasa el tiempo. Con este tipo de hipoteca, los prestatarios deberían prepararse para la posibilidad de que sus pagos mensuales aumentan si las tasas de interés suben, pero también pueden considerar la posibilidad de que sus pagos disminuyen si las tasas de interés bajan.
Hipoteca de tasa mixta
También es posible que tu hipoteca maneje un tipo de interés mixto que combina la tasa fija y variable.
Dividir un préstamo puede brindarte un equilibrio entre la certeza de una tasa fija y la flexibilidad de una tasa flotante. La cantidad de préstamo que tengas en cada una de las partes de tu hipoteca depende de cuál de estas dos condiciones es más importante para ti.
Sea cual sea el tipo de interés que tenga una hipoteca, todos los términos deben estar claros; y ambas partes, prestamistas y prestatarios, deben estar de acuerdo con ellos.
Si a medida que ha pasado el tiempo, los intereses de tu préstamos se elevaron tanto que se volvieron impagables, y ahora estás en problemas financieros con el blanco, ¡contáctanos!
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